Sólo puedo poner como bueno que la localiacción es excelente.
La dirección es impresentable. Sólo contar que puse una reclamación oficial, ya que me negaron poder beber agua del grifo en las comidas, por lo que tenía que pedir agua embotellada. En caso contrario me cobrarían el agua que consumiese. Reclamé a dirección y "me dejaron" seguir bebiendola, pero el día de abandono del hotel, eralicé la reclamación en Turismo.
La limpieza deja mucho, mucho, pero mucho que desear. La comida es impresentable, todos los pescados en salsa rosa, mahonesa, etc. Y las colas para la parrilla hace que se te quiten las ganas de esperar. La lechuga tenía los bordes marrones de pasadita. En fin, pagas como un hotel de 4 estrellas y, es una pena, ya que no llega a tres, por los servicios que ofrece. Las hamacas, un tema importante, TODAS rotas. Realmente, creo que abrieron para "lucrarse" en verano y cerrar al terminar la temporada. El cliente no les importa y la imagen menos.