
La localización del hotel es perfecta. Las habitaciones aunque antiguas son amplias y confortables. El aire acondicionado es un split, muy justo en temporada de mucho calor.

La comida para ser un 4 estrellas es algo inaceptable. Las cenas y comidas, aunque no comimos, mucho rebozado, no había nada saludable salvo el buffet de ensaladas. El desayuno, variado pero ninguna calidad.